octubre 8, 2025

  • Un hombre fue atado porque gritaba y no dejaba que el culto siguiera, al regresar con él para liberarlo, ya no respondió

Cajeme, Son.- Una persona del sexo masculino quedó sin vida al interior de un centro de rehabilitación, luego de que lo amarraran por andar inquieto.

Los hechos se dieron en un centro de desintoxicación denominado «Dios Proveerá» ubicado en la calle Miguel de la Madrid, en el Ejido Gustavo Díaz Ordaz.

Se supo que el finado se encontraba en un estado alterado, gritando y corriendo de un lado a otro, interviniendo en la oración que se hace en el templo de dicho lugar.

El encargado del centro (Óscar) ordenó que la persona fuera amarrada para poder seguir dando gracias a Dios, al término de la alabanza, fueron a revisar al hombre el cual no respondía, estaba inconsciente.

Dieron parte al número de emergencias, inmediatamente acudieron paramédicos de Cruz Roja determinado que la persona ya no contaba con signos vitales.

Elementos policíacos acudieron al punto para tomar nota sobre lo sucedido.

El ahora occiso respondía en vida al nombre de Francisco Javier P. D., de 54 años de edad, vecino del Ejido Tesopobampo.

Con información de Agencia ICE | Gabriel Bracamontes