
Cd. Obregón, Sonora.- Con el objetivo de contribuir a la seguridad alimentaria de su comunidad estudiantil y promover prácticas sustentables, el Instituto Tecnológico de Sonora (ITSON), en conjunto con la Fundación ITSON y la Fundación Ambiental del Valle del Yaqui, realizaron la presentación oficial del Huerto Universitario “Sembrando Futuro”, un proyecto piloto que integra voluntariado, conocimiento académico y vinculación con sector empresarial y social para generar alimentos destinados a un Comedor Universitario Solidario.
Durante el evento, el doctor Ernesto Uriel Cantú Soto, secretario de la Rectoría, en representación del rector del ITSON, doctor Jesús Héctor Hernández López, destacó que a través de alianzas y apoyo, se hizo posible la puesta en marcha de este espacio agroecológico, proyecto que, aunque nace con recursos limitados, se construye con una sólida vocación de servicio, compromiso social y trabajo voluntario.
“El huerto universitario no sólo producirá alimentos, sino que se convertirá en un apoyo directo para estudiantes con necesidades alimentarias, porque alimentar bien también es formar mejor”, señaló.
El doctor Cantú Soto, precisó que el proyecto estará bajo la administración de la Fundación ITSON, con el acompañamiento institucional en aspectos operativos, científicos y de servicios generales. Además, el huerto contará con el respaldo académico de diversas áreas del ITSON, involucrando a profesoras y profesores investigadores en diversas etapas del proceso.
Por su parte, la maestra Vianey del Río Guerra, directora general de la Fundación ITSON, destacó que el huerto forma parte de un proyecto integral vinculado al Comedor Universitario Solidario, el cual busca mejorar las condiciones de vida y el trayecto académico de estudiantes, especialmente aquellos en situación de vulnerabilidad. “La alimentación es un factor clave en la permanencia escolar. Este huerto es una pieza fundamental dentro de una estrategia más amplia de apoyo social”.
Desde la experiencia comunitaria, Omar Angulo, de la Fundación Ambiental del Valle del Yaqui, explicó que el huerto universitario se desarrolla bajo un enfoque agroecológico, libre de químicos y con sistemas de riego eficientes. Señaló que el espacio alberga 16 variedades de hortalizas, entre ellas maíz, frijol tépari, calabaza, betabel, acelga, espinaca, rábano, tomate y brócoli, y que este modelo es replicable en otras instituciones educativas como una alternativa sustentable y formativa.
El arquitecto Heliodoro Montoya Navarro, presidente del Patronato ITSON, resaltó el sentido humano del proyecto, al señalar que “Sembrando Futuro” representa una acción concreta de la sociedad civil organizada para apoyar a jóvenes universitarios que persiguen sus sueños, recordando que muchos estudiantes enfrentan dificultades económicas durante su formación.
Finalmente, Nora Lilia García Encinas, colaboradora del ITSON y voluntaria del proyecto, compartió su testimonio como egresada que en su momento necesitó apoyo, destacando la importancia de sumar esfuerzos y convocar a la comunidad universitaria y a la sociedad en general a integrarse como voluntarios a esta iniciativa.
El Huerto Universitario “Sembrando Futuro” inicia como un proyecto piloto, con miras a crecer y replicarse en espacios más amplios del ITSON, como el Campo Experimental de Transferencia de Tecnología (CETT), consolidándose como un ejemplo de cómo la educación, la solidaridad y la sostenibilidad pueden sembrar oportunidades para el bienestar estudiantil y el desarrollo social.
Se extiende el agradecimiento al personal académico que se ha sumado a esta iniciativa: Doctor Andrés Chávez Almanza, con el apoyo en el análisis microbiológico del agua y compuestos para aplicación; doctora Ruth Gabriela Ulloa Mercado, en la aplicación de bioestimulantes a base de microalgas para mejorar la producción de los cultivos; doctora María Isabel Estrada Alvarado y doctor Luis Alberto Cira Chávez, con el apoyo en el manejo de residuos mediante compostaje; y doctor Ian Mateo Sosa Tinoco en la automatización de sistemas de riego y controles de huerto; fortaleciendo así el carácter educativo, sustentable y de impacto social.